En primer lugar, queremos felicitar a todos y todas la vecinas de Laudio que se han animado a salir a la calle y a participar en todos y cada uno de los actos que humildemente y con apenas recursos hemos programado desde la Coordinadora Jaiak para estas fiestas de Laudio. Agradecer enérgicamente a todos aquellos que organizando o participando en los diferentes actos populares realizados en fiestas han vestido de color y alegría las calles. Son los vecinos de Laudio los que han conseguido que toda aquella iniciativa popular planteada desde los grupos o cuadrillas del pueblo haya sido todo un éxito. Desde la Coordinadora mostramos nuestra satisfacción por el apoyo recibido, que nos llena de ilusión y ganas de proseguir nuestra labor en la dirección que hemos marcado.
Así mismo, queremos mostrar nuestro agradecimiento y felicitar a los Servicios Técnicos y de Limpieza del Ayuntamiento por un trabajo muy bien hecho.
En cambio, no podemos estar tan contentos con muchos de los actos programados por el Ayuntamiento en los que la mayor parte de las veces se despilfarra un dineral excesivo. Valen como ejemplo los conciertos de Zumalakarregi y verbenas de la Herriko Plaza sin apenas afluencia de público (exceptuando aquellos en los que gente de Laudio es la protagonista) y la desierta Plaza de Toros en los actos taurinos.
Lo dicho hasta ahora nos lleva a realizar la primera de nuestras reflexiones:
1.- Es indudable el éxito cosechado por aquellos actos promovidos por los actores de estas fiestas, sean grupos culturales o cuadrillas. Creemos que este éxito radica en el propio modelo festivo propuesto implícitamente por esta Coordinadora, el cual no es otro que el de convertir al pueblo de Laudio en organizador y participe de la fiesta y no en mero espectador del espectáculo de turno propuesto. Nos reafirmamos en nuestro lema a favor de unas fiestas populares y participativas, en el lema de unas fiestas hechas por y para el pueblo. Por eso pedimos al Ayuntamiento de Laudio que de pasos en el camino de un nuevo modelo festivo, un modelo que abra la gestión de las fiestas a todos los que en ellas participamos, para que estas sean elaboradas entre todos. Hay tiempo suficiente para analizar mediante que fórmula puede materializarse esta participación en la gestión y desde Jaiak estamos dispuestos a colaborar en esta labor, pero teniendo claro que este es un paso que no puede demorarse más.
2.- Es hora, igualmente, de dar carpetazo por fin a la polémica que año tras año acompaña al txupinazo. Guiados por nuestro espíritu constructivo no deseamos hechar más leña a una hoguera que poco tiene de positiva. Por eso, desde nuestro afán constructivo y en sintonía con nuestra reivindicación creemos que es hora de apostar por un txupinazo abierto y diferente que recoja el sentir del pueblo. Es hora de que sean los vecinos de Laudio los que elijan de manera democrática a una figura tan especial e importante como es el pregonero. Es hora de que sea este pregonero la única y mayor autoridad mientras duren las fiestas de Laudio, y es hora de que sea única y exclusivamente esta figura quien salude y de comienzo a las fiestas de Laudio desde la balconada del Ayuntamiento. Reiteramos que las fiestas son del pueblo y los gobernantes no harían nada mal por una vez en quedarse entre bambalinas y ceder el protagonismo a los verdaderos actores de las fiestas. Consideramos que Laudio se merece un inicio de fiestas mucho más digno, un txupinazo limpio, libre de altercados y representativo de la voluntad popular. Realizamos ahora ya este llamamiento y lo reiteraremos cuando las fiestas del 2007 esten a las puertas.
3.- Estas fiestas han tenido otro punto negro que no debemos pasar por alto. Hablamos del ataque sufrido por las txosnas durante los primeros días de fiesta. Nos parece un acto totalmente intolerable que en el plano estrictamente material podía haber causado unos daños brutales. Este es sin duda un ataque directo, no falto de ideología retrograda, contra un recinto festivo de gran importancia, un ataque directo a las fiestas populares de Laudio. Exigimos a las instancias judiciales que aclaren lo antes posible la autoría de este ataque, aunque la desidia del fiscal en el juicio no nos hace albergar grandes esperanzas. Consideramos que de confirmarse la autoría del único inculpado en estos hechos, el Ayuntamiento de Laudio debería tomar cartas en el asunto al ser éste un miembro de su corporación. Y que nadie piense que con ataques de este tipo va a conseguir acabar con las fiestas de Laudio.
4.- Otro de los problemas que aún quedan por resolver es el del calendario festivo. Es Indudable que el cambio realizado hace algún año recortando los días ha ayudado mucho para la mejora de las fiestas, pero no consideramos que ésta pueda ser la solución definitiva. No podemos conformarnos con unas fiestas partidas en dos tramos, con un largo descanso (que por avatares del calendario puede llegar a ser de hasta diez días, como ocurrirá en el 2008) y coincidentes con fiestas de pueblos o ciudades de alrededores que en poco nos benefician. Es necesario estudiar el tema e ir buscando una salida definitiva acorde a los intereses y necesidades actuales.
Estas son las reflexiones más importantes que realizamos desde la Coordinadora, asumidas por todos los grupos que la componemos en representación de cientos de vecinos y vecinas de este pueblo. No deseamos en ningún caso que caigan en saco roto y mostramos nuestra total disposición para trabajar y compartir trabajo en la dirección que hemos señalado. Nuestra labor en pos de unas fiestas populares y participativas
En cambio, no podemos estar tan contentos con muchos de los actos programados por el Ayuntamiento en los que la mayor parte de las veces se despilfarra un dineral excesivo. Valen como ejemplo los conciertos de Zumalakarregi y verbenas de la Herriko Plaza sin apenas afluencia de público (exceptuando aquellos en los que gente de Laudio es la protagonista) y la desierta Plaza de Toros en los actos taurinos.
Lo dicho hasta ahora nos lleva a realizar la primera de nuestras reflexiones:
1.- Es indudable el éxito cosechado por aquellos actos promovidos por los actores de estas fiestas, sean grupos culturales o cuadrillas. Creemos que este éxito radica en el propio modelo festivo propuesto implícitamente por esta Coordinadora, el cual no es otro que el de convertir al pueblo de Laudio en organizador y participe de la fiesta y no en mero espectador del espectáculo de turno propuesto. Nos reafirmamos en nuestro lema a favor de unas fiestas populares y participativas, en el lema de unas fiestas hechas por y para el pueblo. Por eso pedimos al Ayuntamiento de Laudio que de pasos en el camino de un nuevo modelo festivo, un modelo que abra la gestión de las fiestas a todos los que en ellas participamos, para que estas sean elaboradas entre todos. Hay tiempo suficiente para analizar mediante que fórmula puede materializarse esta participación en la gestión y desde Jaiak estamos dispuestos a colaborar en esta labor, pero teniendo claro que este es un paso que no puede demorarse más.
2.- Es hora, igualmente, de dar carpetazo por fin a la polémica que año tras año acompaña al txupinazo. Guiados por nuestro espíritu constructivo no deseamos hechar más leña a una hoguera que poco tiene de positiva. Por eso, desde nuestro afán constructivo y en sintonía con nuestra reivindicación creemos que es hora de apostar por un txupinazo abierto y diferente que recoja el sentir del pueblo. Es hora de que sean los vecinos de Laudio los que elijan de manera democrática a una figura tan especial e importante como es el pregonero. Es hora de que sea este pregonero la única y mayor autoridad mientras duren las fiestas de Laudio, y es hora de que sea única y exclusivamente esta figura quien salude y de comienzo a las fiestas de Laudio desde la balconada del Ayuntamiento. Reiteramos que las fiestas son del pueblo y los gobernantes no harían nada mal por una vez en quedarse entre bambalinas y ceder el protagonismo a los verdaderos actores de las fiestas. Consideramos que Laudio se merece un inicio de fiestas mucho más digno, un txupinazo limpio, libre de altercados y representativo de la voluntad popular. Realizamos ahora ya este llamamiento y lo reiteraremos cuando las fiestas del 2007 esten a las puertas.
3.- Estas fiestas han tenido otro punto negro que no debemos pasar por alto. Hablamos del ataque sufrido por las txosnas durante los primeros días de fiesta. Nos parece un acto totalmente intolerable que en el plano estrictamente material podía haber causado unos daños brutales. Este es sin duda un ataque directo, no falto de ideología retrograda, contra un recinto festivo de gran importancia, un ataque directo a las fiestas populares de Laudio. Exigimos a las instancias judiciales que aclaren lo antes posible la autoría de este ataque, aunque la desidia del fiscal en el juicio no nos hace albergar grandes esperanzas. Consideramos que de confirmarse la autoría del único inculpado en estos hechos, el Ayuntamiento de Laudio debería tomar cartas en el asunto al ser éste un miembro de su corporación. Y que nadie piense que con ataques de este tipo va a conseguir acabar con las fiestas de Laudio.
4.- Otro de los problemas que aún quedan por resolver es el del calendario festivo. Es Indudable que el cambio realizado hace algún año recortando los días ha ayudado mucho para la mejora de las fiestas, pero no consideramos que ésta pueda ser la solución definitiva. No podemos conformarnos con unas fiestas partidas en dos tramos, con un largo descanso (que por avatares del calendario puede llegar a ser de hasta diez días, como ocurrirá en el 2008) y coincidentes con fiestas de pueblos o ciudades de alrededores que en poco nos benefician. Es necesario estudiar el tema e ir buscando una salida definitiva acorde a los intereses y necesidades actuales.
Estas son las reflexiones más importantes que realizamos desde la Coordinadora, asumidas por todos los grupos que la componemos en representación de cientos de vecinos y vecinas de este pueblo. No deseamos en ningún caso que caigan en saco roto y mostramos nuestra total disposición para trabajar y compartir trabajo en la dirección que hemos señalado. Nuestra labor en pos de unas fiestas populares y participativas
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